-Cariño...- dijo Brittany desde el salón de repente, y al decir esa palabra a Santana se le inflaba el corazón de una manera que se sentía plena
-Dime...-dijo con una enorme sonrisa
-Cuando lleguemos... lleguemos a casa...- decía un poco cohibida Brittany soltando un candelabro de plástico rosa en la caja que ponía "herencia de Ania"
-No te sientas rara al decir casa Britt, nuestra casa- dijo Santana mientras caminaba hacia ella
-Ya San, lo se...uff- respiro hondo Britt mientras sonreía mientras Santana la miraba de igual manera -Cuando llegamos a casa, no quiero que nadie en el mundo nos moleste-dijo picarona la rubia abrazándola suavemente por la cintura
-Y eso... ¿que plantea usted señorita?- pregunto Santana mientras acariciaba su pelo
-Pues pense que, como tienes que ir a trabajar seguro el Lunes, solo tenemos un día, y me gustaría pasarlo al ciento por ciento contigo, no lo tomes a mal, se que las chicas seguro quieren vernos y todo eso, pero, solo quiero estar contigo- dijo Brittany un poco sonrojada
-Por dios, haces que me tiemblen las piernas Britt- dijo Santana escondiendo su cabeza en el hueco de sus hombros
-¿Es muy egoísta?-pregunto Brittany mientras buscaba acariciando su cara con la punta de su nariz hasta dar con la suya
-No, para nada... es lo que mas deseo yo también- dijo Santana cogiendo sus mejillas con ambas manos
-Te he dicho hoy, que te quiero mucho...- dijo Brittany dandole un suave pero tierno beso en los labios
-No, solo unas doscientas millones de veces, pero creo que no...- bromeo Santana volviéndola a besar
-Bollers de la pradera, parais o vengo mas tarde- se oye la voz de Ania
-¡Oye!, las llaves son para emergencia- dijo Brittany sin soltar a Santana
-Hija que quieres, os iba a dar una sorpresa, pero vamos que me la he llevado yo- dijo Ania
dejando lo que parecía la cena en la mesa
-Y si llegamos a estar desnudas...- dijo Santana con los brazos cruzados
-Pues no se, hubiera sido un buen recuerdo de vosotras- dijo Ania sonriendo
-Al final vas a acabar con una chica, ya te lo dije- aviso Brittany mientras la abrazaba
-Era broma tia- rio Ania mientras se abrazaban
-Cosas mas raras se han visto...- susurro Santana al recordar su etapa "hetero"
-Mira señorita Lopez, como se todo sobre ti ya que llevo años soportando que la psicópata esta me cuente todo sobre tu persona, se que te gusta mucho el sushi, y en honor vuestra despedida.... ¡tachan!- dijo Ania enseñándole una bandeja preciosa repleta de sushi
-Oh dios mio, ¡que pinta!- chillo Santana al ver semejantes manjares
-¡Ania!, que flipante- dijo Brittany alado de Santana
-Es del mejor restaurante que hay en la ciudad- presumió Ania señalando el logo del restaurante Yamazato
-Muchas gracias, no te deberías de haber molestado- dijo Santana abrazándola
-No es molestia, para nada, estoy muy feliz- dijo Ania mirándola a la dos
-Mi heredera- dijo Brittany abrazándola
-Eso eso, quiero saber cual es mi herencia- dijo Ania echando un vistazo por encima a las cajas del salón
-Te vas a divertir...- bromeo Santana
-Si casi todas las cajas son para ti- dijo Brittany señalando a algunas
-Vaya, parece que es mas fácil mudarme aquí, hay mas cosas que en mi casa- bromeo Ania
-Oye ¿va a venir tu chico?- pregunto Santana mientras cogía copas y servilletas de la cocina
-Iba a venir, pero se puso muy pesado y mira chica, yo no estoy para aguantar mas tonterías- dijo Ania relajada
-¿Vas a dejar a Rick?- pregunto Brittany mientras la ayudaba a sacar el sushi de las bolsas
-No... bueno eso nadie lo sabe, pero siempre estamos igual, nos damos espacio para calmarnos, si no la situación es inaguantable- dijo Ania, Santana llego con las cosas y con la cara que reflejaba incomodidad -Pero no preocuparos enserio, estoy super bien, tenemos esta relación así...- dijo Ania ayudando a Santana con las copas que traía en la mano
-Bueno... espero que todo vaya bien para ti- dijo Santana sonriendo
-A mi Rick me cae bien, pero es verdad que quitando el sexo, pareces amigos- dijo Brittany sentándose en la mesa alado de Santana y frente a Ania
-Oye y tu que sabes sobre mi vida sexual- riño Ania mientras Santana estaba atenta a la conversación
-Lo que me cuentas tu... se hasta como de grande es- dijo Brittany tranquila
-Mi niña no tiene filtros... como bien sabes- susurro entre broma Santana a Ania
-Bueno, dejemos de hablar de mi... por que yo también se cosas- dijo Ania mientras cogía
la copa de vino tinto, haciendo que Santana por poco escupiera el poco vino que tenia en la boca
-Por cierto ¿no tenéis Coca-cola? a mi el vino pijo no me va mucho...- dijo Ania oliendo la copa
-Eh no... y no es pijo, es del chino de abajo- dijo Brittany pensando en por que no había Coca-cola
-¿Y eso?, tu bebes muchísima cola, aunque yo no se que haces para estar tan buena, con lo que come y bebe- dijo Ania dandole una oportunidad al vino
-Pero dice que como en España están despidiendo a muchas personas, ella particularmente quiere boicotear la empresa- dijo Santana mientras acariciaba su mejilla
-Es verdad... que vergüenza que tu en el bar sirvas ese veneno, ya yo no lo voy a consumir mas- dijo orgullosa Brittany cogiendo la mano de Santana
-Espera que me voy a ir de aquí escaldada al final- dijo Ania haciéndose ofendida
Y así, entre risas y anécdotas, las tres chicas pasaron una velada increíblemente feliz, cómoda y agradable, Ania ya se iba a ir cuando Santana la paro en la puerta mientras Brittany iba en busca de una caja pequeña para que se empezara a llevar su herencia pronto.
-Ania, te quería dar las gracias por todo lo que has hecho... hoy y por cuidar de ella todo este tiempo- dijo Santana sonrojada
-No hay de que Santana, si alguna vez necesito una abogada, espero que me hagas precio- bromeo Ania hacienda reír
-No enserio, gracias, y gracias también por esta maravillosa cena y por ayudarnos con la mudanza, mañana vienen los de envío y eso, y como ya no estamos pues...- resumía Santana ya que en la mesa Ania se ofreció a supervisarlo todo en su ausencia
-No des mas las gracias... lo hago muy feliz, solo quiero que volváis a casa lo antes posible y retoméis vuestra vida juntas- dijo Ania ganándose un abrazo
-Eh... me tengo que preocupar- bromeo Brittany haciéndose la celosa
-Si, creo que te llevas a Rick y yo me la llevo a ella...- dijo Ania soltándola
-Si claro claro...- dijo Brittany dandole la caja
-Chica ¿pero que tiene esto dentro?- pregunto Ania al ver que la caja al no ser grande pero pesaba como si fuera tres veces mas grande
-Son los dinosaurios de plomo que siempre me querías robar, los que compre en el mercado- dijo Brittany sacando a un diplodocus de color rosa
-Oh vaya... si- dijo Ania sonriendo al ver a los demás en la caja entre papeles de periódicos
-Me he quedado solo al brontosaurus verde pistacho- dijo Brittany volviendo a guardar al dinosaurio en la caja
-Muchas gracias Britt, los pienso de poner ahora mismo en mi salón- dijo Ania contenta
-No los chupes eh, que el plomo es venenoso- dijo Brittany cerrando la caja
-No se que piensas que voy a hacer con ellos, pero desde luego meteremos en la boca no es una de ella...- dijo Ania
-Te ayudo- dijo Santana agarrando la caja para que Ania abrazara a Brittany mientras ella bajaba las estrechas escaleras con los dinosaurios de plomo de colores
-Gracias amiga, por todo...- dijo Brittany dandole un gran abrazo
-No hay de que... ademas tengo una suculenta herencia- bromeo Ania
-Nos vemos pronto ¿no?- dijo Brittany bajando con ella las escaleras
-Claro que si, cuenta con ello, estoy deseando conocer a esa Rachel- dijo Ania
-Ay mi queridísima amiga Rachel, ella es como un enano de jardín con bigotes, vas a tener que hacer terapia cuando veas la cantidad de pelos que me deja en el baño cuando viene, es muy desagradable- dijo Santana al oír eso
-Iugh...- dijo Ania con cara de asco mientras abría el maletero del coche
-Por no hablar de su marido Don Papa Asada... ya los veras, ese día será divertido- sonrío Santana
-No es para tanto..., creo- dijo Brittany riendo
-Buenos chicas, espero poder ir a veros pronto, que tengáis buen viaje- dijo Ania abrazándola a las dos a la vez
-Gracias- dijeron ambas chicas aceptando el afectuoso abrazo
Ania se fue no sin liarla como de costumbre tocando el claxon del coche en mitad de la noche mientras gritaba alguna que otra cochinada.
-Esta muy muy loca, pero es divertida- dijo Santana abrazando a Britt mientras veían como Ania desaparecía por la esquina
-Si, es muy buena amiga...- dijo algo triste Brittany
-Ay Britt... no estés triste amor... veras que pronto la tenemos en casa gritando por los pasillos mientras vienen los pijos vecinos a llamarnos la atención- bromeo Santana para animarla
-Tienes razón... ay Sany estoy muy feliz- dijo Brittany llorando mientras reía
-Y yo... no sabes cuanto- dijo Santana secando sus lagrimas con sus labios
Y el gran día llego, una vez dejaron planteada la mudanza con Ania a cargo, fueron felices hacia el aeropuerto, tuvieron la suerte de coger un vuelo directo hacia Nueva York, ya que apenas salían cinco al día, y los demás eran con escalas y de muchas mas horas, así que una vez tras 8 horas de vuelo y tras cruzar el Atlantico, ya estaban en casa.
-Estas bien Britt...- pregunto Santana preocupada al ver la cara de Brittany una vez bajo del taxi y vio la puerta de su edificio después de tanto tiempo
-Si... claro que si San- sonrío con ilusión Brittany cogiendo la mano de Santana y en la otra una maleta de las pocas que venían con ellas
-¿Señora Brittany? pero que alegría madre de Dios- dijo el amable portero que siempre las trato muy bien
-Oh dios mio Peter, ¿¡como estas, y como esta Betty!?- pregunto feliz y emocionada Britt
-Muy bien muy bien, todos están bien- dijo el señor tras darle un cariñoso abrazo a Brittany, que siempre fue de todos los vecinos, la mas atenta y cariñosa, hasta tal punto que hablaban de sus familias y siempre estaban al día
-Señora Santana que vien la veo, me alegro que estén de vuelta- dijo el hombre muy feliz al ver a la latina con ese brillo en la cara acompañado de su preciosa sonrisa
-Gracias Peter...- dijo Santana dandole un golpecito amistoso en el brazo
-Ya nos pondremos al día eh- dijo Brittany mientras Santana llamaba al ascensor
-Claro claro- sonrío Peter mientras la despedía con la mano
Entre risas llegaron al piso donde estaba su hogar, Brittany miro llena de alegría la puerta gris blindada que pesaba millones de kilos según ella, y no podía esperar para pasar.
-Britt, entra tu, voy a abrir el buzón un momento, ponte cómoda mi amor, vuelvo enseguida...- dijo Santana besándola mientras volvía al ascensor
Brittany introdujo la llave en la cerradura mientras mordía sus labios con una sonrisa y llena de nervios. Paso a la entrada y quiso morir al ver que todo parecía casi igual, casi todo, las fotos que había de ellas dos obviamente ya no estaban, ni sus dibujos en la puerta del frigorífico, ni su abrigo amarillo tras el perchero de la puerta... ahora las pocas fotos que habían, era de Chris, quizás alguna de Beth con Santana y poco mas, la verdad es que aunque igual la casa no tenia ese calor y esa forma que ella recordaba cuando vivía allí, Brittany comprendió que era normal que las fotos estuvieran, no podía ser de otra forma, pero le dolió ver que la casa no era tan acogedora como en su recuerdo, quito esos pensamientos de su cabeza reemplazándolos por la ilusión, camino melancólica por la cocina y por el baño con su adoraba bañera gigante, ahora se dirigía hacia el dormitorio principal, el cual le traía los mejores recuerdos posibles. Pero como parte de la casa, también estaba diferente, todo muy ordenado, y con poca decoración, y como no, una foto de Chris y Santana en una de las mesillas de noche, con un extraño sentimiento cogío la foto y la miro con pena.
-Veo que no te hace gracia ver esa foto, apuesto que la tiraras pronto- se oye la voz de Chris saliendo del baño de la habitación, haciendo que Brittany se sobresaltase
-Chris...eh, ¿que haces aquí solo?- pregunto asustada Brittany al ver las pintas que llevaba, tenia los ojos caídos como la noche maldita donde en Cádiz se emborracho
-Pues no era raro que estuviera aquí hace unos días- dijo Chris apoyado en el marco de la puerta - Aun que si te soy sincero, Santana nunca quería que viviera aquí con ella, pocas veces he dormido aquí- dijo Chris riéndose
-Bueno... tienes razón- dijo Brittany cohibida -Mira siento mucho todo esto, eres buen chico, no te merecías esto por nada del mundo- dijo Brittany apenada
-No si esta claro que el tonto soy yo, sabes cuando conocí a Santana nadie me dijo que su gran amor era una tía, y mucho menos que eras tu... me costo mucho conquistarla, fui muy paciente con ella, por que me dijo que acababa de salir de una relación dolorosa... pero no sabia nada mas- dijo Chris riéndose con ironías, pero Brittany no tenia valor de decir nada -Pero parece ser que nunca la conquiste, simplemente fui un parche- dijo Chris enfadado
-Seguro que no fue así...- dijo Brittany nerviosa
-No te parece, que encima que os quise reconciliar... me merezca ser un cornudo...- dijo Chris mas alterado
-Siento mucho todo esto enserio...es complicado, pero ella no quiso lastimarte nunca- dijo Brittany sin moverse del sitio
-No, ya veo, era mas fácil tenerme engañado, que todos vuestros amigos se burlaran de mi, y encima que la abandonaste una vez mas, fue ella a buscarte para aclarar sus sentimientos, y no de cualquier forma, si no mientras te la follabas- dijo Chris acercándose a ella quitándole el cuadro con su foto para estrellarlo contra el suelo
-¡Ya vale!- grito Santana desde la puerta de la habitación mientras andaba a paso ligero hacia Brittany, mirándolo muy enfadada
-Oh espera espera, ya esta aquí la feliz pareja, se nota que sobro ya aquí- dijo Chris riéndose mientras pateaba el marco roto en el suelo - Os dejo en vuestro nidito de amor, estúpidas...- dijo Chris andando como podía hacia la puerta, pero Santana, aun siendo mucho mas baja a su lado, no dudo y lo paro en seco cogiéndolo por la tela de su camiseta
-No sabes ni lo que estas haciendo, estas borracho- dijo Santana enfadada
-¿Me vas a dar clases sobre que hacer tu?- se burlo de ella
-Siento que hayas sido herido en todo esto, pero que no se te vuelva a pasar por la cabeza insultarla, amenazarla ni mucho menos agredirla... por que no te lo voy a permitir una vez mas- dijo muy seria Santana
-Vaya, que valiente has venido de Europa... te sienta bien ser una lesbiana- se burlo Chris
-Dame las llaves y vete de aquí, no te quiero volver a ver- dijo Santana soltando, una vez mas el se rió en su cara, y tiro las llaves hacia los pies de una asustada Brittany, y sin decir nada mas se marcho dando un sonoro portazo.
Gracias
No hay comentarios:
Publicar un comentario